
Alrededor del mundo contigo, la historia de Belén y Jeremy
Belén llevaba en Londres alrededor de un año, viviendo en una casa compartida con amigos, cuando quiso el destino que uno de ellos tuviese que mudarse. Su habitación la ocupó el hermano de uno de sus mejores amigos, un tal Jeremy, que acababa de llegar desde Nueva Zelanda.
Jeremy se adaptó perfectamente al grupo y todos salían siempre juntos, pero poco a poco, la amistad con Belén, “la chica de la habitación de al lado”, se fue convirtiendo en algo más. Cuando el visado de él caducó, decidió viajar por Europa con visado de turista unos meses para poder estar más tiempo con ella. Y cuando Jeremy ya no pudo alargar más su estancia, tomaron la gran decisión: Belén dejó su trabajo y le acompañó al otro extremo del mundo, Nueva Zelanda, donde viven a día de hoy.
Para su celebrar su boda decidieron cruzar el mundo juntos una vez más y volver a Asturias, la tierra de Belén, nada menos que al precioso entorno Palacio de Casa Estrada en Bimenes. Confiaron en Jaider, de La Mar Studio, para guardar cada uno de los momentos en las fotos que véis en este post.
El vestido de Belén, con falda lisa de seda y cuerpo de encaje, fue confeccionado para ella por Sally Eagle. Lo combinó con un tocado de Le Touquet , velo rosa de Vintage Bodas y ramo de flores El Invernadero. ¿Sus joyas? Su anillo de pedida y una pulsera de oro blanco y brillantes que le prestó Carmen, una de sus mejores amigas.
Jeremy vistió un traje tres piezas de Working Style, con corbata de Ted Baker y gemelos con diseño maorí en plata vieja.
Belén pensó en tener damas de honor, algo muy usual en Nueva Zelanda, pero no se decidió. Finalmente, a última hora, propuso a dos de sus amigas que la acompañaran durante los preparativos… ¡Una gran idea que le ayudo a relajarse antes de caminar hacia el altar!.
Una parte muy emocionante y divertida fueron los discursos, mitad en inglés y mitad en español del padre del novio, el novio, su mejor amigo y el hermano de la novia, pero sin lugar a dudas el momento más especial fue la haka y la canción tradicional que los “kiwis” (neozelandeses) dedicaron a los novios.
Tanto la ceremonia como la celebración tuvieron lugar en el Palacio de Casa Estrada, espacio que gestionan y coordinan mis queridos Vintage Bodas. Del menú se encargó Casa Gerardo, uno de mis caterings favoritos.
La memorable fiesta empezó con el baile de los novios al ritmo del “You got it” de Roy Orbison y acabó después de toda una noche al ritmo de Soul Cats, como no podía ser de otra forma, cuando el sol estaba a punto de salir en Bimenes. ¡Que seáis muy felices!
Eli
22 mayo, 2017 at 9:06 pmMe encanta y no sabéis lo que me presta ver un reportaje tan bonito en mi tierra yerbata (Bimenes)
😍💑
Dorothy
22 mayo, 2017 at 11:10 pmTu tierra es lo más… Y cómo presta eso de oír la palabra “prestar” (en León también la decimos). Besos enormes